Si tu cocina no tiene ventana, no tendrá luz natural y, si no tomas medidas ni buscas soluciones, se verá muy oscura y dará la sensación de estar en una cueva. Algo, que por otro lado es habitual en las viviendas modernas, que cada vez son más pequeñas y no tienen espacio para instalar una ventana en la cocina.
Esto es un problema, ya que una buena iluminación es clave para cocinar y también para crear un ambiente más agradable y acogedor.
Un problema al que nos hemos enfrentado en muchas ocasiones, pero, que por suerte, tiene solución, y a continuación te vamos a contar cómo iluminar una cocina sin ventana del modo más eficaz, para que la falta de luz natural no sea un problema.
¿Cómo dar luz a una cocina oscura y sin ventana?
Todo al blanco
El blanco es el mejor color para una cocina sin ventana, ya que consigue potenciar la sensación de luminosidad, refleja la luz artificial y ayuda a acabar con esa sensación de cueva. Además, también aumenta la sensación de amplitud, lo que es muy importante en las cocinas pequeñas.
Es el tono luminoso por excelencia, por ello, te recomendamos optar por muebles blancos, panelados, de diseño minimalista y sin tiradores, para ganar luminosidad y también uniformidad.
Cocina integrada en el salón
Sin duda, la mejor opción para las cocinas sin ventanas es integrarlas en el salón, ya que de esta forma, además de aumentar el espacio y acabar con la sensación de encerramiento, podrás aprovechar la luz natural de esta estancia.
Las cocinas integradas son tendencia y, una buena solución es utilizar una cristalera como separación de ambos espacios, ya que de esta forma mantendrás la luminosidad y la sensación de continuidad, pero podrás cerrar la cristalera durante el cocinado, evitando que los humos y olores se pasen al salón.
Coloca luces puntuales
Si con la iluminación general no te es suficiente, coloca luces puntuales para conseguir una cocina más luminosa. Puedes añadir apliques sobre las zonas de trabajo como la encimera, la vitrocerámica o el fregadero, que te proporcionarán una luz más directa que solucionará los problemas de visibilidad.
Suelos claros
Del mismo modo que los muebles, también debes optar por suelos claros, que aportarán un plus de luminosidad, amplitud y limpieza. Unas de las mejores opciones son los suelos cerámicos o de madera en blanco, beige, gris claro, etc.
Puertas más grandes
Una buena alternativa para conseguir una mayor iluminación en la cocina es colocar puertas más grandes de lo habitual, que sean más anchas y lleguen hasta el techo. De esta forma, conseguirás que entre más luz de las estancias contiguas.
Opta por una claraboya
Si no puedes abrir una ventana en la pared ni tirar paredes, pero tienes la suerte de vivir en un último piso, está la opción de abrir una claraboya o un tragaluz, para así dejar entrada a la luz natural. De esta forma, recibirás luz cenital de calidad y además, aportarás un toque original a la cocina. Eso sí, antes de nada, solicita permiso a tu comunidad de vecinos.
Estantes con iluminación
Otra excelente solución para una cocina sin ventana es instalar estantes con iluminación incorporada. Puedes optar por baldas con puntos de luz integrados o retroiluminadas, y cualquiera de las dos opciones será un acierto.
Como ves, aunque siempre es mejor contar con una ventana, estas son unas buenas soluciones para las cocinas sin ventana, que te permitirán disfrutar de este espacio sin notar la falta de luz natural. Pide presupuesto y encuentra con nosotros la más grande variedad de muebles de cocina de Alicante.