Poco a poco la jardinería se ha convertido en un pasatiempo que nos hace desconectar y pasar un buen rato mientras cultivamos nuestras verduras y plantas aromáticas. Las cocinas se han convertido en ese espacio idóneo para tener todo al alcance de nuestra mano.
Durante los últimos, los huertos se han convertido en un elemento indispensable para muchas cocinas. La capacidad de elegir lo que cultivamos y observar cómo prospera enriquece la diversidad culinaria de nuestras comidas.
Al introducir un huerto en la cocina, no solo aprovecharás los recursos naturales que te proporcionará, también decorarás la estancia y aprovecharás más el espacio. Y, hoy, te vamos a contar cómo tener el tuyo.
Aprovecha los espacios verticales
Los huertos verticales son una excelente forma de maximizar el espacio de nuestra cocina.
A la hora de incorporar un huerto vertical en tu cocina tienes que tener en cuenta que debe estar cerca de una fuente de luz natural, donde reciba entre 6 y 8 horas de luz al día.
¿No sabes qué plantar?
Las hierbas como albahaca, cilantro, perejil, menta, tomillo y orégano son excelentes opciones. También puedes cultivar pequeñas variedades de vegetales, como tomates cherry, pimientos o fresas.
Escoge macetas o cestas colgantes que tengan un buen drenaje para evitar el exceso de agua. Los contenedores apilables y modulares son especialmente útiles para optimizar el espacio.
Otros consejos para tu huerto vertical:
- Utiliza tierra de maceta de alta calidad o sustrato específico para contenedores que permita un buen drenaje y retención de humedad.
- No riegues en exceso; permite que la capa superior del sustrato se seque antes de volver a regar.
- Poda y cosecha regularmente para fomentar el crecimiento saludable y evitar la competencia por luz y nutrientes.
- Cambia las plantas de posición ocasionalmente para evitar el agotamiento del sustrato y prevenir problemas de plagas y enfermedades.
Utiliza la isla de tu cocina
Una de las mejores formas de utilizar tu isla en la cocina es incorporar un huerto horizontal o una mesa de cultivo.
Las mesas de cultivo vienen en una amplia variedad de estilos, tamaños y materiales. Puedes encontrar mesas de cultivo de madera, metal, cerámica e incluso mesas de cultivo flotantes. Esto significa que puedes elegir una que se adapte perfectamente a la decoración de tu hogar, ya sea rústica, moderna, minimalista o vintage.
Una mesa de cultivo puede ser una excelente herramienta de aprendizaje para adultos y niños por igual. Puedes enseñar a tus hijos sobre la naturaleza, la responsabilidad y la importancia de cultivar alimentos.
Además, si no tienes un buen foco de luz natural, puedes utilizar luces de crecimiento LED para asegurarte de que tus plantas reciban la cantidad adecuada de luz, lo que amplía tus opciones de cultivo.
La ventana puede ser tu aliada
Las ventanas pueden ser tus mejores aliadas para montar tu propio huerto en la cocina. Allí recibirán toda la luz que necesitan y cosecharás productos de calidad.
En una ventana de cocina, es mejor comenzar con hierbas aromáticas como albahaca, perejil, cilantro, tomillo, romero o menta.
Al estar en contacto con el exterior, debes revisar regularmente en tus plantas algunos signos de plagas o enfermedades. Si detectas alguna señal, no dudes en utilizar algún insecticida natural o trampas para controlar las plagas.
Beneficios de tener un huerto urbano en la cocina
- Tendrás acceso a ingredientes frescos, mejorando el sabor y la calidad nutricional de tus platos.
- Ahorrarás dinero a largo plazo. ¡Lo notarás en el ticket de compra!
- Tendrás todo el control de los productos químicos de los fertilizantes y pesticidas que se utilizan o no.
- Cuidar de tus plantas puede ayudarte a reducir el estrés y mejorar tu estado de ánimo.
- Puedes aprender sobre la biología de las plantas, el ciclo de vida de los cultivos y la importancia de la sostenibilidad.
- Reduces la necesidad de transporte de alimentos, disminuyendo la huella de carbono.
Recuerda que la paciencia es clave en la jardinería. Las plantas necesitan tiempo para crecer y desarrollarse. Con el cuidado adecuado, tu huerto en la ventana de la cocina puede ser una fuente de ingredientes frescos y una adición hermosa a tu hogar
